El relé, telerruptor o relevador es un dispositivo electromecánico. Funciona como un interruptor controlado por un circuito eléctrico en el que, por medio de una bobina y un electroimán, se acciona un juego de uno o varios contactos que permiten abrir o cerrar otros circuitos eléctricos independientes. Fue inventado por Josep Henry en 1835.
Dado que el relé es capaz de controlar un circuito de salida de mayor potencia que el de entrada (por ejemplo un motor) mediante un dispositivo de potencia mucho menor (el puerto paralelo en su caso) es un dispositivo muy utilizado en muchisimos circuitos eléctricos y electrónicos.
La gran ventaja de los relés es la completa separación eléctrica entre la corriente de accionamiento, la que circula por la bobina del electroimán, y los circuitos controlados por los contactos, lo que hace se puedan manejar altos voltajes o elevadas potencias con pequeñas tensiones de control. Por lo tanto puede considerarse, en un amplio sentido, como un amplificador eléctrico. Como tal se emplearon en telegrafía, haciendo la función de repetidores que generaban una nueva señal con corriente procedente de pilas locales a partir de la señal débil recibida por la línea. Se les llamaba "relevadores".
Su utilización en electricidad se remonta hacia el año 1850 y a partir de entonces han experimentado un fuerte desarrollo y modernización siendo hoy en día uno de los componentes clave en multitud de circuitos electrónicos, que son los que actualmente originan el mayor consumo mundial de este componente.
En la actualidad pueden encontrarse dos formas básicas de relés que son los electromagnéticos y los estáticos.
Los relés electromagnéticos pueden considerarse divididos en dos bloques o conjuntos:
1. Circuito de excitación.
2. Circuito de conmutación.
El circuito de excitación es el encargado de recibir la señal de mando bajo la forma de una determinada tensión o corriente y generar a partir de ella las acciones necesarias para la actuación de los circuitos de conmutación. Se compone de bobina y conjunto magnético.
Los circuitos de conmutación son el conjunto de contactos que se mueven accionados por la armadura móvil. Cada grupo de contactos puede estar formado por dos láminas que correspondería a un interruptor o de tres láminas que correspondería a un contacto conmutado o inversor. El número de circuitos independientes que contiene un relé depende de sus aplicaciones y del fabricante del mismo.
Por lo tanto, el principio de funcionamiento de un relé es activar y desactivar cuando el electroiman que forma parte del relé es energizado (le ponemos un voltaje para que funcione). Esta operación causa que exista conexión o no entre dos o más terminales del dispositivo. Se logra con la atracción o repulsión de un pequeño brazo, llamado armadura, por el electroimán. Este pequeño brazo conecta o desconecta los terminales de contactos.
Los factores que hay que tener en cuenta a la hora de elegir los contactos de un relé son varios; como son la tensión de funcionamiento, la intensidad de la corriente, la carga y la frecuencia de la señal a conmutar. Es importante saber también cual es la resistencia del bobinado del electroimán y con cuanto voltaje este se activa. Este voltaje y esta resistencia nos informan que magnitud debe de tener la señal que activará el relé y cuanta corriente se debe suministrar a éste.
Este funcionamiento conlleva dos ventajas:
1. Permite el control de un dispositivo a distancia. No se necesita estar junto al dispositivo para hacerlo funcionar.
2. Con una sola señal de control, se puede controlar varios relés a la vez.
Los relés estáticos son los que no poseen ninguna pieza móvil para realizar la conmutación.
El principio de funcionamiento de los relés estáticos o de estado sólido, tenemos a) con acoplamiento óptico y b) con acoplamiento por relé de baja potencia.
El relé se puede aplicar en multitud de circuitos. Pensemos que es un dispositivo que conmuta dos contactos eléctricos sin que exista correspondencia eléctrica directa entre el circuito conmutador (el que hace circular corriente por la bobina) y el conmutado (el que se conecta a los contactos). Así, por ejemplo, puede conectarse un calefactor a la red de 220V, aplicando la tensión de una pila de 9 voltios a la bobina del relé.
No sólo pueden "aislarse" circuitos de muy distinta tensión de funcionamiento, sino también de muy distinta corriente. Por ejemplo, con un relé de 12V - 10mA pueden encenderse en un automóvil unos faros halógenos que consuman 10A funcionando también a 12 V.
Existen una amplia variedad de tipos de relés: Con temporizacion RT que cierran o abren durante un tiempo determinado el contacto. Tienen un campo muy extenso en ventilación, animación, trampillas deslizantes, escaleras mecánicas, bombas, alumbrado, señalización, control, etc. La gama comprende: RTA. Retrasa la puesta en tensión. RTB. Temporiza la puesta en tensión desde un pulsador. RTC. Retrasa la puesta sin tensión desde un pulsador. RTH. Temporiza la puesta en tensión. RTL. Temporiza la puesta en tensión y sin tensión de menera repetida. RTMF. Detectan las variaciones anormales de tensión e intensidad.
Los relés y los contactores son componentes parecidos y que realizan funciones similares pero con algunas diferencias esenciales y que es necesario conocer.
Los relés y los contactores son componentes cuya función es parecida a un interruptor, abrir y cerrar circuito, por ejemplo el que activa la iluminación, con la diferencia de que los interruptores son manejados directamente por la mano del usuario y los relés y contactores son controlados por una tensión continua y/o alterna y a distancia.
Por tanto un relé o un contactor es un interruptor automático que posee varios contactos, ya sean, Normalmente Cerrados NC o Normlamente Abiertos NA, y podemos realizar diversas combinaciones y sus aplicaciones son múltiples. Pero hay que tener en cuenta que tanto los relés como los contactores que tienen la misma función (abrir y cerrar contactos), pero para distintas potencias, es decir, hay que saber diferenciar entre relé cuyo contactos son para mediana potencia y el contactor cuyo contactos son de mayor potencia. Las clases y características de los relés varían según la función a realizar y fabricante.
Básicamente los relés son para comandar pequeñas potencias o potencias de control, por tanto están en los circuitos de control o en circuitos cuyas cargas (motores, equipos consumidores en general) son de pequeñas potencias. Suelen representarse por la letra R.